Es cierto: Bloomberg sabe que Apple ya ha empezado a contratar ingenieros para trabajar en la nueva red inalámbrica 6G. Es un hecho que aún no hemos tenido tiempo de experimentar la velocidad del 5G, pero también es cierto que, una innovación como esta, lleva su tiempo.
Por eso, parece que Apple ha decidido anticiparse. Tras el lanzamiento del iPhone 12, que ya es compatible con la red 5G, la marca estadounidense ha decidido empezar a trabajar en el futuro.
Si se confirma el rumor, será la primera empresa que trabaje en el siguiente nivel de conectividad.
La contratación ya ha comenzado
Apple, con sede en Cupertino (California), ya ha empezado a anunciar nuevas ofertas de empleo. La empresa busca ingenieros de investigación de sistemas para "trabajar en las actuales y futuras generaciones de redes".
La búsqueda se extiende a San Diego, en las oficinas donde la empresa se centra en el desarrollo de tecnología inalámbrica y el diseño de chips.
El anuncio de empleo dice que, los profesionales contratados, tendrán la oportunidad única de trabajar en el impacto positivo que Apple ha estado trabajando (no sólo en el presente, sino también en el futuro).
El anuncio va más allá y dice que, las personas contratadas, "investigarán y diseñarán los sistemas de comunicación inalámbrica de próxima generación (6G)".
Más que un rumor, estamos hablando de un proyecto real. De este modo, Apple se sitúa a la cabeza de la carrera en lo que respecta a la red inalámbrica 6G.
Otra novedad
Esta es otra noticia del gigante tecnológico estadounidense, que no se ha detenido en el desarrollo de los"gadgets de siempre". Hay varios rumores de que Apple está trabajando en unas gafas de realidad virtual y también en un sensor de monitorización del sueño.
En un momento atípico y que hizo que Apple reprogramara varios eventos, todo indica que la marca no está de brazos cruzados. Otro ejemplo de esta actividad constante es el"Apple iCar", que puede estar casi confirmado.
De este modo, la empresa se asegura de no detenerse y seguir produciendo a una velocidad vertiginosa. Y el desarrollo de una red inalámbrica 6G lo demuestra.